09 Mar.- Resulta cuanto menos paradójico que las pymes, micropymes y autónomos que son quienes forman la mayoría del tejido empresarial en España, sean los que legalmente, sufren una mayor indefensión a la hora de cobrar deudas a clientes. Este problema afecta en gran medida a autónomos y pequeñas empresas que se encuentran desprotegidos ante el impago de empresas más grandes y con mayores recursos.
Además, la Ley de Morosidad no les facilita las cosas. En ella no se especifica la forma de justificar que la pequeña empresa o el autónomo están sufriendo abuso por parte del cliente deudor, simplemente se limita a indicar qué tipo de recargos, penalizaciones o negación de deducciones o subvenciones se les puede aplicar.
La indefensión para cobrar deudas a clientes, les afecta sobre todo porque las pymes no cuentan los medios suficientes para controlar de forma adecuada el flojo de facturación o de cobro de su empresa. Carecen de presupuesto o medios de negociación para gestionar de forma adecuada este proceso.
Por esta razón, empresas como Meycon somos el medio adecuado para llevar a cabo la reclamación e impagos. De esta forma, la empresa acreedora externaliza la el proceso y tramitación del cobro de deudas, lo que le permite seguir centrado en tu negocio sin dedicar más tiempo y dinero del necesario a la hora de cobrar deudas a clientes morosos.
En Meycon apostamos en primer lugar por la negociación extrajudicial, dando la oportunidad al deudor de solventar la deuda de forma rápida y sin más complicaciones para las partes. Sin embargo, si el deudor no está dispuesto a colaborar con este método, la reclamación acaba en un procedimiento judicial que puede conllevar a un aumento de costes y de tiempo de resolución.
Es cierto que los clientes de la pyme y el autónomo suelen ser los que más tardan en pagar. Esto supone que tienen que soportar que se llegue al límite de los 60 días hasta cobrar un servicio o incluso se retrase el pago, sin contar con ningún tercero que les ayude a evitarlo. Hoy en día no existen mecanismos para proteger a pymes y autónomos ante este problema.
En Meycon sabemos que el impago de facturas no afecta de la misma forma a empresas grandes o pequeñas. Mientras que para la empresa grande, el retraso en el pago de facturas no supone mayores consecuencias a nivel global, para la pyme o el autónomo, puede suponer la continuidad o no de su actividad comercial.
El aumento de los impagos siempre está directamente relacionado con la subida de costes y la falta de liquidez en los mercados. Esto hace que aumente la morosidad entre negocios y la necesidad de solicitar los servicios especializados de empresas de recobro de deudas como Meyon.
En mayor o menos medida, a la crisis económica está afectando a la gran mayoría de las empresas en la actualidad y la reclamación de facturas por impago está a la orden del día.
En Meycon, contamos con personal especializado en cobrar deudas a clientes.
Contacta con nuestro equipo de Meycon y te asesoramos para encontrar soluciones reales a tus problemas de recobro de deudas.
Teléfono: 613 342 311 o por mail: info@meycon.es